UNA HISTORIA DE VERANO

                              “UNA HISTORIA DE VERANO”



1 de agosto. Por fin había llegado el día, hoy venia mi primo Óscar a pasar quince días a mi casa, lo hacía todos los veranos. Tenemos la misma edad, es muy divertido y nos lo pasamos muy bien cada vez que viene. Todavía estaba intentando abrir los ojos cuando Toby, mi perro, me saltó encima y empezó a chuparme la cara. Era su forma de decirme buenos días, le encantaba, a mí no tanto. Toby tiene solo unos meses, es un Golde Retriever, sí , como ese del anuncio de “Scottex”, y es muy cariñoso, a veces demasiado.
Me levanté de la cama, me vestí, aunque todavía medio dormido y bajé a desayunar. Le pregunté a mi madre a qué hora llegaría Óscar, me dijo que seguramente antes de comer y mientras removía los cereales en la leche, me puse a pensar en todo lo que podíamos hacer en los quince próximos días. Me di cuenta que los cereales empezaban a ahogarse en la leche y tuve que comérmelos rápidamente. Salí a la calle y me puse a tirar unos tiros a canasta. Sabía que Óscar aún tardaría pero no podía resistir volver la cabeza cada vez que pasaba algún coche. El tiempo pasaba lentamente y después de pasar un rato jugando, me senté en el porche. Me quedé mirando la ventana de la casa de enfrente, la persiana estaba medio bajada. La casa llevaba abandonada unos cuantos años y estaba bastante deteriorada. De repente un sudor frío recorrió todo mi cuerpo, había un hombre encapuchado mirándome fijamente desde la ventana, pero enseguida desapareció. Imaginaciones mías, pensé. En ese momento vi acercarse un coche, era un Land Rover negro, el coche de mi tía. Me acerqué corriendo a recibirlos, mi tía salió del coche, me acarició la cabeza deshaciéndome el pelo y sin decirme nada entró a mi casa. Me fijé en que tenía ojeras y por su aspecto parecía que no había dormido en semanas. La verdad, es que las cosas entre la madre y el padre de Óscar no iban muy bien. Mi primo bajó del coche y cogió su maleta. Nos chocamos la mano haciendo nuestro saludo especial.
-Todavía te acuerdas
-Pues claro!
-¿Cómo ha ido el curso? ¿Cuántas te han caído?- le dije, aunque sabía la respuesta
-Ninguna, ¿Y a ti?
-Dos, pero tranquilo, ya tendré tiempo de estudiar.
Mi madre nos llamó diciendo que ya estaba la comida. Comimos en cinco minutos y subimos a mi habitación. Al llegar vi por la ventana la casa de enfrente y me acordé de lo que habíha visto antes, todavía me daban escalofríos cuando me acordaba, así que se lo conté a Óscar:
-Seguramente te lo habrás imaginado
-Ya
Era lo que yo había pensado, pero no estaba del todo convencido, me había parecido bastante real. Nos pusimos a jugar con la consola a un nuevo videojuego que le habían comprado a Óscar. Jugamos durante un buen rato, y cuando ya nos habíamos cansado, bueno, él más que yo porque le ganaba siempre, le pregunté si bajábamos a jugar al baloncesto. Llamé a unos amigos y jugamos hasta que se puso el sol. Estábamos agotados y nos disponíamos a entrar en casa cuando, mi madre salió con Toby y nos dijo que lo sacáramos a pasear. Nos fuimos a regañadientes. Bajamos calle abajo, las farolas se encendieron, ya era de noche y no había ni un alma por la calle. Llegamos al bosque y Toby se paró a “hacer sus necesidades, me giré y…¡No podía ser! El hombre encapuchado de la casa abandonada estaba entrando al bosque y llevaba un saco muy grande a la espalda. Por suerte no nos había visto. Avisé a Óscar.
-¿Es él?-preguntó también un poco sorprendido.
-Sí
-Pero, ¿Dónde puede ir a estas horas, y con ese saco?
-¡Vayamos a averiguarlo!
A Óscar no le gustó mucho la idea, pero o tuvo más remedio. Cogí a Toby en brazos y nos adentramos en el oscuro bosque. Casi no podíamos verle, pero gracias al ruido de sus pasos, conseguimos seguirle. Caminamos un buen rato hasta que llegamos a un claro donde había una cabaña. Nos escondimos detrás de un árbol grande que había. El hombre dejó caer el saco y entró a la cabaña. Miramos el saco y observamos con horror que asomaba una mano por la obertura, estaba manchada de sangre. ¡No podía ser!
Nos miramos boquiabiertos, dentro del saco había ¡¡Un cuerpo humano!!
Saqué mi móvil corriendo para pedir ayuda, pero no había cobertura. Así que Óscar se tuvo que ir a avisar a la policía. Me quedé sentado en el suelo, con Toby entre mis piernas, estaba asustado… Aquel hombre era un asesino. De repente oí la puerta de la cabaña cerrarse, el hombre ya había salido y llevaba una pala ¡Iba a enterrar el cadáver! Estaba muy asustado, no podía parar de sudar. Entonces Toby se me escapó de las manos ¡ NO! Pensé. Toby fue corriendo hacia el asesino mientras le ladraba y le gruñía, éste al ver que el perro era pequeño, se rió y le pegó un golpe con la pala enviándolo contra un árbol.
-¡Nooo!- se me escapó. El hombre se volvió hacía mí. Me escondí rápidamente detrás del árbol, pero ya era demasiado tarde, me había visto.
Yo solito me había delatado. Empecé a oír pasos acercándose lentamente. El corazón me latía con fuerza, estaba temblando. Los pasos se oían cada vez más cerca, pensé en salir corriendo pero estaba paralizado. Me acurruqué con la cabeza entre las piernas. De repente los pasos cesaron. Iba a morir allí mismo, no quería creerlo. Cerré los ojos fuertemente y entonces…

Sonó el despertador, me desperté sobresaltado, parecía que el corazón iba a salirme por la boca, estaba empapado de sudor. Miré el despertador, 10:30, 1 de agosto. Ya no me acordaba que había puesto la alarma. Toby se quedó mirándome y emitió un pequeño de ladrido, como queriendo decir:
-¿Qué te pasa?
-Tranquilo Toby- dije acariciándolo- Solo ha sido una pesadilla.
Miré por la ventana la casa de enfrente, todas las persianas estaban bajadas. Respiré aliviado. Mi primo Óscar no tardaría en llegar, así que me vestí rápidamente y bajé a desayunar.


                                                  FIN

7 comentarios:

  1. Bueno pues aqui está, la historieta que os prometí.Espero que os haya gustado

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  2. Muchas gracias Julia me alegro que te guste!!!!

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  3. Me ha gustado mucho!! Me he asustado eeh, encima lo he leído de noche y tela jajaj
    Menos mal que al final sólo era una pesadilla jaja
    Un beso!

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  4. Muchas gracias!!! jeje otro beso para ti!!!!!!

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  5. Que susto....jajajaja Està molt xula Marcos :)

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